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El Carnaval de Cádiz planta cara a los responsables de la crisis (Nº59)

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La Duquesa de Alba, la represión policial, los banqueros  y los políticos corruptos, en el punto de mira.

Eduardo Albaladejo


    De nuevo el Carnaval de Cádiz ha vuelto a ser la crónica de la realidad social del país. Cientos de agrupaciones, las llamadas “ilegales” porque no se acogen a las reglas del Concurso oficial del Carnaval  y a los intereses comerciales, han llenado las calles con disfraces de todo género y con las letras más mordaces de los últimos años. La larga crisis, que sufren sobre todo las clases más humildes y los trabajadores en general, el deterioro en las condiciones de vida y laborales y el acelerado contraste entre la forma de vida de los que causaron esa crisis y los que la padecen, han provocado que hasta las agrupaciones carnavalescas más señeras hayan reflejado este año esa aguda visión popular de la realidad.

  Con diferencia, el paro, los banqueros, Rajoy / Zapatero, Teófila Martínez, la alcaldesa de Cádiz perteneciente al PP,  y la Casa Real se han llevado el grueso de las críticas y la sorna callejera de este año. Además, la conmemoración del II Centenario de la Constitución de 1812, proclamada en Cádiz, también se ha llevado lo suyo. El fracaso de los planes llenos del boato y despilfarro con que se pretendía celebrar la fecha, por la falta de presupuesto y las peleas entre los clanes de las diferentes Administraciones  y la falta de entusiasmo y vinculación popular, ha sido el pasto para llamas llenas de ironía y mordaz crítica.
Veamos algunas de estas letras, que, evidentemente saben mejor al escucharlas en vivo y más en los callejones gaditanos llenos de pueblo con ganas de diversión y más alegría que las penurias cotidianas:

SICARIOS POLICIALES  

Este pasodoble es de la chirigota “Los Hinchapelotas” y pone a caldo a los policías antidisturbios, fieles guardianes de los poderosos y sicarios, como ellos mismos llaman, contra todos aquellos que se oponen a este estado de cosas:

Tú con casco y con las botas,
con metal en la puntera,
yo con greñas y sandalias, pancarta, banderas, banderas, banderas.
Tú con pelotas de goma,
yo tan solo con mi voz.
Tú, porra reglamentaria,
yo, un perro, una flauta y una canción.
Estoy intentándole cambiar a este mundo
el compás que le marcan los banqueros
y tú, cómplice de ellos, pegando sin preguntar,
sicario profesional y cumplidor funcionario,
justificando el salario como sanguinario perrito guardián.
¿Qué más te da si luego están tus hijos y los míos?,
heredarán la sociedad que tu has consentido,
la sociedad del capital que defendiste con sangre.
Algún día el uniforme ya no te valdrá de “ná”,
te veras débil y viejo encerrado en un hospital,
esperando a la guadaña sólo y triste,
dándole el último beso a esta vida que se va.
Ojalá sea rabiando por cada palo que diste.

LA DUQUESA DE ALBA

  Los parásitos que constituyen la Casa de Alba, los insultos televisivos del duquecito a los jornaleros andaluces y la pleitesía con que los socialistas han tratado a esa mala hierba de nuestra tierra (la Duquesa fue nombrada por el sinvergüenza de Chaves Hija Predilecta de Andalucía, para vergüenza de todos los hijos y vecinos de esta tierra),  dio pie a la comparsa “La Serenísima” para escribir y cantar la siguiente letra:
Esta la canto en gaditano,
esta la canto en andaluz,
porque en el fondo me he sentío
un pobrecito mantenío y un chusma como ciudadano,
porque al cabrón del Cayetano de sus cojones le ha salío. Todos los andaluces
no somos tan frescos.
Por ejemplo, si fuera por este que habla,
en un cruce de espadas tú ya estabas muerto.
Yo soy de los andaluces que al traje de luces, el caballo y la copla
le tienen puesta la cruz, porque es el símbolo
andaluz de la derrota.
Yo no aguanto que tu madre, vieja, rica y desperfecto,
sea la hija predilecta de toda mi Andalucía,
pero menos todavía que en su boda con un facha,
bailando medio borracha, salga por televisión,
mientras mis propios paisanos le tocan las palmas
y por su ramo de novia, las tontas pierden la calma.
Esa es la mitad de Andalucía,
de la que, como andaluz, yo maldigo y reniego,
pero no aguanto que un chulangano aristócrata y parásito
se pase con mi pueblo.
Bastante hay con los canallas de nuestros putos gobernantes,
que con limosnas nos callan,
ahora, lo mismo que antes, que la mitad de mi gente saca los dientes todos los días y por culpa de la otra, tenemos rota Andalucía.


MEMORIA HISTÓRICA

  También los agravios por la recuperación de la memoria histórica inspiraron a “Los ratones coloraos” la siguiente copla:

Sin ninguna intención de ofender,
ni faltarle al respeto,
vamos a sentarnos
y, de nieto a nieto,
quiero que hablemos
de las batallitas de nuestros abuelos,
lo qué hicieron y cómo vivieron,
quiénes eran y cómo murieron.
El suyo era un Generalísimo condecorao
con más estrellas que cuerpo
y mi abuelo, en cambio, un simple soldao.
Lo que usted tiene
lo heredó, se lo encontró,
ya le venía con el apellido Franco.
Yo lo que tengo me lo he ganao con mi sudor,
sin apellidos y toa la vida trabajando.
El suyo era un dictador, un asesino,
que mataba abuelos, por ejemplo, el mío.
Los dos lucharon por lo que pensaban,
por sus ideales,
pero en el bando enemigo
y el destino para siempre
los juntó en un valle,
el Valle de los Caídos.
Mi abuelo estuvo en trabajos forzaos viviendo en penumbra
porque tuvo el privilegio,
con sus propias manos,
de cavar su tumba.
Mientras que el suyo está en los altares
y bajo una cruz,
para que los fachas le ofrezcan su rezo.
El mío creo que está allí metío en la fosa común,
“ajín” rebujao con millones de huesos.
Igual que pa el mío,
tengo pa su abuelo el sitio perfecto,
en un cementerio,
para que descanse con todos sus muertos.

EL PARO

  Miren cómo analiza la reallidad esta otra letra de “The Cádiz Gospel Choir”:

Dicen, hay muchos que dicen
que ya somos libres,
porque en nuestra España se acaba el terror.
Dicen, hay muchos que dicen
que aquí ya se vive sin miedo a las bombas
y es mucho mejor.
Yo jamás lo puedo poner en duda,
pero el terrorismo no se acabó.
Paro, aquí queda el paro,
el gran terrorista que invade las casas
y hasta el corazón.
Ay, tirititrán, ay tirititrán
cuántos viven su secuestro.
Ay, tirititrán, ay tirititrero,
cinco millones lo sufren ya.
Cada día hay por sorpresas
otro tiro por la espalda,
cada cierre de una empresa
una bomba que te estalla.
Prisioneros en un zulo tan oscuro como Ortega Lara.
Cada mes un comunicado
que te amenaza con nuevas bajas,
y un político que proclama
que esto ya pronto se va a acabar.
Pero el paro sigue matando
quiere sangre, quiere más.
Terrorismo de los bancos,
de Europa y de los mercados,
la banda más criminal.
ETA se ha callado
y otros pistoleros están rematando al pueblo,
ésta es la verdad
cinco millones han perdío la paz y la libertad.

TEÓFILA

  Los “Señores de la naturaleza” le cantan así a la alcaldesa y a esos fastos del Bicentenario a los que hacíamos alusión:

¿Cuánto va a costarnos el Bicentenario a los gaditanos?,
si muchas familias aquí ya no tienen ni pa comer.
¿Cuánto va a costarnos los caprichos de unos cuantos
a una ciudad de paraos?
A ver, dígamelo usted.
Jefes de gobiernos de todo el mundo
vendrán a Cádiz
y toas sus mentiras se las creerán.
Yo no sé que pretende usted,
engañando a Cádiz otra vez,
señora alcaldesa.
Yo ya no puedo callarme más:
a usted, yo le voy a decir a usted,
pa que se entere de una vez,
de que aquí estamos ya hasta los cojones,
sabiendo que Cádiz está arruiná,
encima nos quiere embargar,
con el Bicentenario de los mangones.
No sé cuántos millones costará,
ni cuánta gente aquí vendrá
para celebrar el cumpleaños.
Luchar, también debería de luchar
para que se celebrara aqui una cumbre pa los paraos.
Pa que sirve aquí la Constitución,
si trabajo no tengo yo.
Dígame si es necesario
que tire tantos millones
pa celebrar un Bicentenario.

LA PEPA

  Y una de mis preferidas,  la chirigota “Viva la Pepi 2012”, del popular  Selu,  retrata a un grupo de trabajadoras de la limpieza, ataviadas evidentemente de “chicas” de la limpieza, encargadas de dejar como los chorros del oro el Oratorio de San Felipe Neri, lugar en donde se firmó la Pepa, la Constitución de 1812, y en donde este año se pretenden celebrar los fastos del centenario. El gracejo y la mordacidad es la tónica de esta agrupación. En esta letra, una de las limpiadoras -representada por todas ellas- habla de su hijo, de su Moisés -Moi-:
Hay que ver que tu Moi “na má” que piensa en los amigos.
Hay que ver tu Moi se esta “tol” día rascando el ombligo.
Hay niños hiperactivos y mi niño el Moi, es hiperpasivo.
Mucha gente que no lo conoce bien
dice:  “Hay que ver tu Moi que golfo es”.
¿Que mi Moi es golfo porque lo han echado de tres colegios, está en busca y captura y muy de vez en cuando hace rituales satánicos? :
¡¡¡ Ni mijita!!!
El otro día una vecina me coge y me dice:
que si hay que ver tu niño Moisés que vive mejor que los teletabis,
en vez de estar al pie del cañón con los indignaos.
¿Con los indignaos de que?,
tú no la visto como se indigna si pierde el Cádiz.
Ahora ha empezado a salir con una chiquilla
(de chiquilla “ná”, separada y con dos niños).
Es así muy moderna, estilo Chambao
(se le ve una hechura de puerca…),
con ella quiere él compartir su vida y formar una familia
(que la forme en otro sitio, no me la vaya a meter en mi casa),
pero a pesar de todo me gusta esa chiquilla.
Mi Moi sus relaciones las lleva de maravilla,
yo prefiero que mi Moi tenga esa novia y esos amigos con esos pelos que al fin y al cabo son buena gente...
(aunque a alguno le daba yo un manguerazo)
a que este con una Infanta... y termine hecho un delincuente.