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La herencia del arquitecto José Miguel Torallas

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25 aniversario de la Cooperativa de viviendas Rosa Luxemburgo

“El objetivo de la arquitectura, es transformar la realidad en la sociedad igualitaria y fraternal que todos deseamos. Cuando la arquitectura esté más cerca del pueblo, el mundo será más justo. Dejaran de existir palacios, hay que construir de una forma en la que todo el mundo pueda interrelacionarse” Oscar Niemeyer.

 María García Oset

   Estas coordenadas, estos pensamientos, eran los que guiaron al Arquitecto José Miguel Torallas Gatoo, que obtuvo a los 24 años su título de arquitecto.
Corre el año de 1978, y se inaugura el Estudio de Arquitectura de José Miguel Torallas Gatoo, sito en la madrileña calle de Virgen de Lourdes, 30. Junto con otros técnicos, “Payel” habla de poner en marcha un proyecto que hasta ahora no ha sido llevado a cabo por ningún estudio de arquitectura, y es crear una Cooperativa de Viviendas, asequibles a la clase trabajadora, y en condiciones de dignidad.
   ¿Pero quien es este hombre que sueña despierto?  José Miguel Torallas Gatoo, es uno de los mejores arquitectos de Madrid, ¿Sabe alguien que concursó al proyecto de la Opera de la Bastilla?  Muy pocos arquitectos españoles se atrevieron a presentarse, si no era a través de grandes estudios de arquitectura. Es una anécdota más  para sentirnos orgullosos de nuestras viviendas.
   José Miguel no es ajeno a las luchas sociales por la democracia y se implica en ella, siempre está en la lucha a nivel de sus compromisos de trabajo, y toma como ejemplo de que los trabajadores pueden vivir mejor otro de los proyectos de su padre -también arquitecto renombrado, la Urbanización El Bosque es suya-, como diseño de lo que podría ser la planificación de viviendas para la clase trabajadora.
   Aquel proyecto en ciernes tiene que ser avalado por un grupo político, y él se dirige entonces a los que más representan  sus ideas, el Partido Comunista de España. Julio García Cadenas y Timoteo Sánchez Ruiz, son, entre otros, los encargados de trabajar con él en la búsqueda de terrenos que den vida a este proyecto, y de mirar en muchos lugares que estén  disponibles, al final se concreta el sueño, en los terrenos ya casi urbanizados de San Sebastián de los Reyes (Madrid).
En éste transcurrir de  tiempo ha pasado prácticamente un año; no solamente se ha hecho trabajo de prospección de terrenos a buen precio, si no que, para llevar a cabo dicho barrio, él, como arquitecto, se  ha desplazado a Londres, para visitar sobre el lugar un barrio muy parecido a lo que tiene como proyecto trasladar aquí: se llama Milton Keines. Cuando regresa trae toda la documentación que sirva de base al proyecto, y aquí entra su compañera Consuelo Tovar, que traduce sin descanso del inglés, las bases de dicho de proyecto. El estudio de arquitectura es un hervidero de arquitectos amigos, Ramiro, -no me acuerdo de su apellido- arquitectos técnicos como Pradal, que vive en nuestro barrio, José Luís que también vive en nuestro barrio, hay discusiones sin límite…todos comparten el sueño, que se va haciendo realidad. Por entonces se decide que se pondrá publicidad para que se apunten sobre todo los afiliados al PCE y a CC.OO, que entonces eran fuertes, en el sentido del respaldo de la clase trabajadora. Por supuesto, no hay dinero para empezar, y aquí entra de nuevo el PCE, como avalista del proyecto para conseguir que a los cooperativistas se nos concedan los créditos necesarios.

UN BARRIO ABIERTO

   Se empieza a construir hacia los primeros meses del año 1979. Y empiezan a surgir los problemas. Al equipo de los primeros arquitectos se han unido otros arquitectos, aparejadores, y ven que no hay suficiente espacio -según ellos-, para todas las viviendas. Unos por buena voluntad, otros por que no lo ven claro, empiezan a asediar a Torallas, -“Payel”, para los amigos-, para que se revise el proyecto inicial. Él no lo ve así, y continúa con todos los arquitectos, queriéndoles hacer ver que no hay equivocación en la planificación de las viviendas. Hay arquitectos que abandonan y otros que continúan, son días de desvelos, y nuestro arquitecto pasa por una crisis de ansiedad que le mantiene fuera, aunque no del todo, del proyecto. Pero la propiedad intelectual del proyecto es, sin duda, de José Miguel Torallas Gatoo.
Sí, es verdad que hemos luchado juntos, por reivindicaciones para hacer a nuestra forma de entender como deben ser los barrios, primero los cubos de basura que queríamos ¿os acordáis?, segundo los cables de alta tensión, esas propuestas con detalles y estudios, que abrieron los ojos a otras urbanizaciones, y que al final conseguimos que nos quitasen, como también conseguimos que se cerrara el famoso vertedero.
    Nuestro barrio es un barrio abierto a todos los habitantes de San Sebastián de los Reyes. Y sobre todo, hay que destacar que nosotros mismos gestionamos y administramos nuestros ingresos como cualquier comunidad de vecinos,  tenemos nuestros empleados, que son a la vez vecinos también.
   Como motivo de convivencia tenemos nuestras entrañables cenas por calles.  Nuestro barrio, es un barrio modelo y sí, es cierto que ya pintamos canas, tenemos nuestros “achaques”,  alguno de nosotros, que creo somos muchos, tenemos nietos, ¿no os habéis dado cuenta cómo ahora son los pequeños de nuestro pequeños los que están pendientes de nuestro barrio para preguntar: ¿Cuándo son las cenas?
   Visto al día de hoy, (25 años después) podemos decir con orgullo que el resultado ha sido extraordinariamente positivo, que ha merecido la pena y que habitamos en un barrio de característica únicas o poco comunes, (tanto arquitectónica como socialmente), donde no sólo las viviendas y su gestión fueron ejemplares, sino que sus moradores han hecho honor al principio de Oscar Niemeyer  y han demostrado su capacidad de movilización y solidaridad entre sí y con los demás en múltiples ocasiones a lo largo de este tiempo.
   Esa realidad, el pensamiento de Oscar Niemeyer y la utopía de José Miguel Torallas Gatoo, que él supo llevar a cabo, nos hacen estar despiertos en la vida.